La falta de financiación paraliza las obras del Teatro Audrey y aplaza sin fecha el musical inspirado en la actriz

<p>A finales del mes de julio, decenas de obreros, entre camiones y grúas, se afanaban a contrarreloj, tarea tras tarea, para acabar el<strong> Teatro Audrey</strong>, el escenario efímero más grande de Madrid, que iba a inaugurarse con un musical inspirado en el mito del cine el próximo 27 de noviembre. Pero este martes, a escasos 20 días de esa fecha, en la parcela situada detrás del Distrito Telefónica apenas había movimiento. Sólo cuatro o cinco trabajadores ultimaban algunos detalles antes de echar el cierre y cubrir con una lona la fachada del edificio, pues la falta de financiación para acabar este megaproyecto, que supera los 16 millones de euros, ha obligado a la productora Since 1953 a paralizar las obras y a aplazar el estreno <i>sine die</i>.</p>

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 Estaba previsto que este 27 de noviembre estrenara, pero la productora ha detenido la actividad esta semana ante la falta de fondos para seguir adelante  

A finales del mes de julio, decenas de obreros, entre camiones y grúas, se afanaban a contrarreloj, tarea tras tarea, para acabar el Teatro Audrey, el escenario efímero más grande de Madrid, que iba a inaugurarse con un musical inspirado en el mito del cine el próximo 27 de noviembre. Pero este martes, a escasos 20 días de esa fecha, en la parcela situada detrás del Distrito Telefónica apenas había movimiento. Sólo cuatro o cinco trabajadores ultimaban algunos detalles antes de echar el cierre y cubrir con una lona la fachada del edificio, pues la falta de financiación para acabar este megaproyecto, que supera los 16 millones de euros, ha obligado a la productora Since 1953 a paralizar las obras y a aplazar el estreno sine die.

«Dicen que no hay dinero», señalaba uno de los escasos empleados que este martes se movía sobre el terraguero que rodea los accesos al teatro, cuya fachada -montada al igual que el resto del teatro como un mecano- lucía casi terminada.

Tanto la construcción del edificio como el espectáculo estaban siendo costeados «a través de rondas de financiación» -a modo start-up– y la última, lanzada el pasado septiembre, «no se cubrió en plazo», detalló este martes a GRAN MADRID Carlos Pérez-Font, asesor financiero el musical y socio de la consultora Financial Development Consulting.

Esta compañía, «especializada en situaciones especiales o de tensión financiera«, ha sido contratada a petición de los inversores, que ya este verano sumaban más de 60, según confirmó el impulsor, guionista y productor de la obra musical, José Ignacio Salmerón, en la visita de obra que realizó con los medios para mostrar la grandiosidad del proyecto.

En aquel momento, Sean Hepburn Ferrer, hijo de la actriz, ya se había desvinculado como socio del teatro y del musical, no sólo por «conflictos conceptuales» con Salmerón, como señaló en una nota de prensa, sino también por «diferencias económicas». «Estoy preocupado por los inversores del proyecto. El presupuesto se ha disparado y sin duda afectará negativamente a las expectativas económicas reales», dijo públicamente.

José Ignacio Salmerón, este verano, en el teatro.
José Ignacio Salmerón, este verano, en el teatro.ELENA IRIBAS

Con esa noticia, y la de los gastos extra de la construcción, este verano los inversores pidieron la intervención de una consultora externa para «clarificar la rentabilidad del proyecto» y «validar hipótesis financieras», aseguró Pérez-Font. «El año pasado, las lluvias demoraron la obra y eso ha generado sobrecostes, además de elementos que han aparecido o la acometida eléctrica, que estaba más lejos de lo que se creía», concretó.

Pérez-Font no quiso señalar este martes la cuantía que ha quedado desierta en esa imprescindible ronda de financiación, pero ese «susto» ha provocado que las obras, y por tanto el musical, queden suspendidos temporalmente.

Para solucionar este contratiempo, la consultora está teniendo conversaciones «a diario» con inversores y espera que en uno o dos meses tengan amarrado el total de la financiación para terminar el proyecto. «Estamos tocando todas las opciones posibles», señaló Pérez-Font, quien aseguró que una vez conseguida toda la inversión se retomarían las obras y un mes o mes y medio después podría estrenar, algo que calculan que ocurrirá en el primer trimestre del próximo año.

Según detalló, «el teatro está muy avanzado, al 75%». «El escenario ya está montado y las butacas las tenemos en un almacén. No se han puesto para que no se estropeen», agregó el asesor financiero.

Un obrero, este mes de julio, trabaja en el interior del teatro.
Un obrero, este mes de julio, trabaja en el interior del teatro.ELENA IRIBAS

Este lunes, con la obra ya paralizada, la productora reunió a los artistas para comunicarles la situación. Pese al disgusto, los impulsores confían en que parte del elenco se podrá recuperar cuando llegue el momento de estrenar.

Mientras, y sin fecha estable en el calendario, el importe de las 2.000 entradas que ya se habían vendido de Buscando a Audrey, precisó el asesor de la consultora, «ya está siendo devuelto».

El Teatro Audrey, un espacio diáfano de más 4.500 m2, comenzó a construirse el pasado mes de mayo en una parcela propiedad del Ayuntamiento de Madrid y cedida a la productora durante cuatro años.

Construido como un mecano, está previsto que el teatro albergue tres escenarios en forma de medio hexágono (para que la escena no pare en ningún momento). En él se instalarían 150 butacas giratorias en primera línea, además de 1.300 tradicionales.

El musical, que cuenta con la dirección de Juan Luis Iborra y la música de Fernando Velázquez -ganador de un Grammy y un Goya y autor de las bandas sonoras de Lo imposible, Ocho apellidos vascos o El Orfanato– no narra la vida de Audrey Hepburn sino una historia que evoca a su leyenda y su elegancia.

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